jueves, 19 de julio de 2012

Plaza Baquedano

Plaza Baquedano en  los años 1930
Se aprecia el Mapocho ya canalizado y la estación Pirque. Todavía no existía la costanera y el parque Balmaceda

Hasta finales del siglo XIX, bastaba con alejarse un poco por los dos únicos caminos que existían hacia el oriente, el camino de “Apoquindo” o “Los Condes” (actual avenida Providencia) o el camino de Peñalolén (actual avenida Irarrázabal), para encontrarse con la realidad campesina de la época.

En 1872, al asumir como intendente de la ciudad de Santiago, don Benjamín Vicuña Mackenna, concibió dos proyectos  que marcarían el desarrollo futuro del sector oriente de la capital. El primero de ellos, fue el “Camino de Cintura”, que comprendía las actuales avenidas Vicuña Mackenna, avenida Matta y avenida Blanco Encalada, hasta llegar a la antigua estación central. Este límite estaba destinado a separar los espacios, crear en el borde urbano una red de paseos interconectados y descargar a los barrios centrales del exceso de tráfico.
El segundo proyecto, fue aprovechar la zona pedregosa del límite oriente de la ciudad, donde confluían la Alameda de las Delicias, el nuevo camino de cintura, el camino de “Los Condes” o “Camino de Apoquindo”,  la calle de Mapocho, y el vado existente en ese lugar que permitía cruzar el rio, para transformarlo en 1875 en la “Plaza de la Serena”. De esta forma, lo que hasta ese entonces eran sitios eriazos y basurales, comenzaría a transformarse en parques para los habitantes de la ciudad de Santiago.


 


 

Posteriormente, y producto del mejor aprovechamiento de los terrenos liberados por la canalización del rio Mapocho a finales del siglo XIX, la “Plaza de la Serena” fue modificada y ensanchada, comenzando un verdadero polo de desarrollo a través de la urbanización de los terrenos colindantes y la aparición de quintas de descanso y casas para la naciente clase media.

En 1892, con motivo de la celebración de los 400 años de la llegada de Cristóbal Colón a América, se rebautizó la plaza “La Serena” por “Plaza Colón”

En 1889 empieza a operar el ferrocarril hacia Puente Alto. La estación terminal se encontraba a un costado de la plaza, donde actualmente se encuentra el parque Bustamante. Esta estación comenzó a tener gran movimiento, por lo que a poco andar, en 1905 se encarga al arquitecto francés Emile Jecquier la construcción de un edificio para la nueva estación, la que se nombró como “Estación Pirque”.

Hacia el poniente, en los terrenos ganados al rio Mapocho después de su canalización, nacía el nuevo Parque Forestal, transformando los basurales, en un parque de estilo fránces.

Al conmemorarse el primer centenario de la nación, la plaza cambia nuevamente de nombre, pasando a llamarse “Plaza Italia”, debido al monumento regalado por la colonia italiana para las fiestas de celebración del aniversario patrio.

Hacia fines de los años 20, la Plaza nuevamente cambió de nombre, bautizándose como “Plaza Baquedano” en honor al General Manuel Baquedano, vencedor de la Guerra del Pacífico. El monumento ecuestre se instaló en el centro de la rotonda y la antigua escultura italiana se trasladó a un costado de la plaza. Su transformación, cuya fisonomía conserva hasta el día de hoy, fue realizada por los arquitectos Alberto Véliz y Carlos Swinburn. La nueva estatua fue inaugurada en septiembre de 1928.




 

0 comentarios:

Publicar un comentario