jueves, 25 de julio de 2013

Pérgola de las Flores

 
En el bandejón central de la Alameda, entre las calles Estado y San Antonio, frente a la iglesia de San Francisco, se ubicaba la Pérgola de San Francisco, más conocida como la Pérgola de las Flores.
 
Sus orígenes se remontan a los primeros años del siglo XX, cuando se instalaban a la salida de la iglesia, grupos de vendedoras que ofrecían ramos de flores a los fieles que salían de misa los días domingos.
 
Como una forma de ordenar este comercio, en 1910, el intendente de la época, Pablo Urzúa Vergara instaló mesones, transformando el lugar en el mercado oficial de flores de la ciudad.
Años más tarde, en 1927, a instancias del ministro de hacienda, Pablo Ramírez Rodríguez,  el sector sufre una completa remodelación, construyéndose locales individuales y pilares a su alrededor.
Lo que originalmente comenzó con floristas ofreciendo sus productos en canastos a los transeúntes, se fue convirtiendo con el tiempo, en un paseo dominical,  espacio de discusión política y centro de convivencia social.









Sin embargo, la ciudad crecía hacia la vecina comuna de Providencia, y la avenida se hacía cada vez más estrecha para el creciente número de automóviles y buses que transitaban por ella, generando así, un constante peligro para los peatones que visitaban la pérgola.

Durante el gobierno de Gabriel González Videla, asumió la alcaldía el médico talquino José Santos Salas Morales.  Durante su mandato se propuso un plan modernizador el que incluía ampliar la Gran Avenida, modernizar el matadero y trasladar la pérgola de San Francisco a una nueva ubicación.
Respecto a esta última, el plan era instalarla en las cercanías de la estación Mapocho, para lo cual edificó nuevas instalaciones al lado de la Vega Central.
Las floristas se resistían a esta medida y comenzó un enfrentamiento entre los artistas, encabezados por Alejandro Flores y Pedro Sienna, quienes defendían la permanencia de la Pérgola en la Alameda y los urbanistas y vecinos del centro de la ciudad, quienes reclamaban por el ruido y la basura que generaban los negocios.
Estando así las cosas, en la madrugada del 14 de abril de 1948, en tan solo tres horas, la pérgola fue demolida por el Municipio. Bajo hechos consumados, las floristas se trasladaron a las nuevas dependencias al otro lado del Rio Mapocho.
Entre San Antonio y Mac Iver se encontraba el Jardín Inglés. Este pequeño parque, al igual que la Pérgola de las Flores, fue demolido debido a la angostura que se producía en la Alameda
Estas acciones inspiraron años más tarde la recordada obra musical de Isidora Aguirre y Francisco Flores del Campo “la Pérgola de las Flores”, estrenada en 1960 por el teatro de ensayo de la Universidad Católica, dirigida por Eugenio Guzmán y con un reparto que incluía a los actores “Ana Gonzalez”, “Silvia Piñeiro” y “Carmen Barros”, entre otros.

Bibliografía
  • Municipalidad de Santiago. Alcalde entre el 10/04/1946 al 8/01/1950
  • Wikipedia
  • Educarchile
  •  Temas Nov. 2012
  • Memoria Chilena






 

viernes, 17 de mayo de 2013

Cerro San Cristóbal




El Cerro San Cristóbal, llamado así por Pedro de Valdivia, en honor a San Cristóbal de Licia, patrono de los viajeros, se encuentra ubicado en la ciudad de Santiago. Tiene una altura de  880 msnm y se eleva 280 metros sobre la ciudad. Junto a los cerros colindantes Tupahue, Chacarillas, Los Gemelos y La Pirámide, forman parte del Parque Metropolitano de Santiago. Sus 722 hectáreas lo convierten en uno de los parques urbanos más grandes del mundo.

Antes de la celebración del centenario de la república, el cerro presentaba un aspecto rocoso y sin vegetación. Su ladera sur fue utilizada como cantera, y sus piedras sirvieron para construir las grandes obras de la ciudad, así como los adoquines de las calles de Santiago. El visionario Benjamín Vicuña Mackenna, en 1870 manifestaba la idea de transformar el Cerro San Cristóbal en un gran parque para la ciudad de Santiago.

Sin embargo el tiempo pasaba y el cerro gris se mantenía. Con el inicio del siglo XX, en 1903, se instala en su cumbre el Observatorio Astronómico Mills, de propiedad en la actualidad, de la Pontificia Universidad Católica de Chile.












 
 
 
Cinco años después, en 1908, se inaugura el santuario de la Inmaculada Concepción y la gran estatua de la virgen, verdadero símbolo de la ciudad.

Con el tiempo, la idea de transformar el cerro en un gran parque público fue tomando vida. Como el cerro pertenecía a distintos dueños, fue necesario dictar la ley Nº 3.295 de 1917, impulsada desde 1916 por Alberto Mackenna y Pedro Bannen. Esta Ley permitía al gobierno aceptar en donación, comprar o expropiar los terrenos que se extendían desde el Bosque Santiago al Cerro San Cristóbal, declararlos de utilidad pública y destinarlos a la formación de un gran parque.

En 1921 comienzan los programas de forestación y 1922, se entrega el sistema de regadío, se inaugura el camino cumbre y el camino a La Pirámide. En 1925 se construye el funicular, el Zoológico Nacional y el Torreón Victoria. Años más tarde, en 1931, se entrega la Capilla del Santuario de la Cumbre.

Pasan 30 años y en la década de 1960 se construye la plaza México, la piscina Tupahue, la Casa de la Cultura Anahuac y los juegos infantiles Gabriela Mistral.
 
Finalmente, el actual Parque Metropolitano se crea como una nueva entidad jurídica a través de la ley Nº 16.464 del 25 de Abril de 1966, la cual reunió los servicios del Cerro San Cristóbal y el Jardín Zoológico en uno solo.



 

sábado, 18 de agosto de 2012

Calle Estado



El actual paseo Estado, tiene sus orígenes en la fundación de la ciudad. Allí tuvieron sus casas- -solares las familias de la más antigua aristocracia de la ciudad, entre ellos los Álvarez de Toledo, los Lasso de la Vega, los Lisperguer, los Rios, los Larraín, los Covarrubias, los Rojas, los Boza, los Cruz y otras familias de alta alcurnia.
Fue llamada en un tiempo de San Agustín, por el convento ubicado en ella desde la última década del siglo XVI. Más tarde tomó el nombre de calle del Alguacil Mayor y posteriormente calle del Rey. Este último nombre lo tomó por las procesiones que en ella se realizaban cada vez que un nuevo presidente venía a gobernar en nombre del Rey de España, y en cuya oportunidad se paseaba el estandarte Real  (1)
La calle del Rey vinculo a Chile con la potestad española. El recuerdo del sello real continúo perdurando, hasta que  Francisco de la Lastra, por decreto del 20 de enero de 1825, lo transformo en el símbolo del “Estado” de Chile. (2)






Bibliografía
(1)    Historia de las calles, Luis Thayer Ojeda
(2)    Santiago calles viejas. Sady Zañartu

Biblioteca Nacional


La Biblioteca Nacional de Chile es el principal centro bibliográfico del país y en él residen numerosas y valiosas colecciones de libros, manuscritos, fotografías, dibujos, videos, periodicos, musica, entre otros.
 
Su historia comienza el 19 de agosto de 1813, cuando la junta de Gobierno de la época, publica en el “Monitor Araucano” la fundación de la Biblioteca Nacional, con las firmas de Francisco Antonio Pérez, Agustín Manuel Eyzaguirre y Juan Egaña.
 
En sus inicios, su principal actividad fue recopilar ejemplares entre los vecinos de Santiago y el resto de las ciudades. Durante el periodo de la reconquista, el trabajo fue detenido y retomado nuevamente en 1818. En este periodo, el principal hito para su consolidación, fue la instrucción de O’Higgins de traspasar a la biblioteca, las antiguas colecciones que habían pertenecido a los jesuitas y que se encontraban en la Universidad de San Felipe.
 
La biblioteca continuó incrementando sus volúmenes con el trabajo de su director, don Manuel de Salas y la colaboración de fray Camilo Henríquez. En 1820, con la creación del depósito Legal, que obligaba a las imprentas dejar en la Biblioteca Nacional una copia de cada libro, revista o periódico publicado, llega un nuevo impulso en la formación de la Institución.
 
En los siglos XIX y XX, las donaciones fueron otras importantes fuentes para incrementar sus fondos. Se destacan las bibliotecas de Mariano Egaña, Benjamín Vicuña Mackenna, Andrés Bello, Claudio Gay, Monseñor José Ignacio Víctor Eyzaguirre, Diego Barros Arana, José Toribio Medina, la colección Matta Vial, el fondo bibliográfico Raúl Silva Castro, la biblioteca Guillermo Feliú Cruz y la biblioteca Antonio Doddis, convirtiendo a la Biblioteca Nacional de Chile en una de las mas importantes de Hispanoamérica.
 
El edificio de la Biblioteca Nacional fue uno de los proyectos del centenario de Chile, y su ubicación fue ampliamente debatida en el Congreso. Algunos parlamentarios sugiriendo ubicarla donde se encuentra el Mercado Central, otros querían instalarla al final del Parque Forestal, o al lado de un establecimiento de la policía. Finalmente, en 1913 quedó claro cual sería su ubicación definitiva.



 



Su construcción se inició en 1913, en la manzana comprendida entre la Alameda, Miraflores, Moneda y Mac-Iver, mismo lugar donde las monjas Claras tenían su convento.
 
Se planteó un proyecto en cuatro etapas, de las cuales a la fecha se han materializado las fachadas de las calles Alameda, Miraflores y Moneda. El lado de Mac-Iver, ya nadie se acuerda.
 
El edificio de inspiración Neoclásica, tiene una fachada principal donde destacan sus columnas de doble altura, y sendos ventanales iluminan las salas interiores. Una cúpula central complementa el ingreso. Su parquet fue confeccionado en maderas de mañio, nogal, ébano y lingue.
 
El lado oriente del edificio, mira a la plaza Vicuña Mackenna, y su ingreso se realiza a través de una escalinata escoltada por dos grandes columnas.
 
La obra estuvo a cargo del arquitecto Gonzalo Garcia Puga,quien había diseñado este edificio a principios del siglo XX.
 
En 1925, la Biblioteca Nacional se trasladó a su actual emplazamiento en el centro de Santiago, creándose el Archivo Nacional como institución independiente.
 
Hoy día, el edificio es la sede de la Dirección de Archivos, Bibliotecas y Museos, y en sus dependencias funciona la Biblioteca y Archivo Nacional. Posee una de las mayores colecciones de Latinoamerica,.

Bibliografía

·         Memoria Chilena
·         Fundación Futuro
·         Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos



Museo de Bellas Artes



Fundado en 1880, el museo funcionó en sus inicios en el piso superior del Congreso Nacional. Posteriormente, en 1887, fue trasladado al Partenón de la Quinta Normal. Sin embargo las nuevas instalaciones eran insuficientes, tanto en espacio como en personal. Esta situación obligaba trasladar las obras a otras dependencias para poder exhibirlas, exponiéndalas a riesgos innecesarios. Algo similar pasaba con la escuela de Bellas Artes.

En 1902, se nombró una comisión encargada de estudiar la situación, llamar a concurso y licitar una nueva sede para el Museo y la Escuela de Bellas Artes. Después de varias alternativas, todas desechadas, se optó por un lote de 24.000 m2, en los terrenos que habían sido ganados al rio Mapocho con posterioridad a su canalización.



 





En 1905, la comisión decidió por el proyecto elaborado por el arquitecto Emilio Jecquier. Se trataba de un edificio  orientado de oriente a poniente, inspirado en el Petit Palais de París, de estilo neoclásico, con una cúpula metálica vidriada adquirida en Bélgica de estilo art noveau. En el exterior del edificio, en su entrada principal, se encuentra el alto relieve “alegoría de las bellas artes” del escultor chileno Guilermo Cordova y rodeando el palacio, en su friso, se instalaron 22 medallones de mosaico cerámico con los retratos de famosos pintores y escultores de las artes universales.
En su interior se encuentra el hall principal tipo “invernadero”, con luz natural que atraviesa su cúpula vidriada. En el segundo piso, sobre el balcón, se aprecia un altorelieve con dos ángeles que sostienen un escudo.
Al frente del edificio se encuentra la réplica de la escultura “Unidos en la gloria y en la muerte” de Rebeca Matte, donde se representa a  Ícaro y Dédalo. La escultura fue donada en 1930 por el marido de la artista. después de su muerte.
En su lado poniente, donde funciona en la actualidad  el Museo de Arte Contemporáneo, se encontraba la Escuela de Bellas Artes.
El Palacio de Bellas Artes se inauguró el 21 de septiembre de 1910, durante la conmemoración del aniversario del primer centenario de la república, con la presencia de los presidentes de Chile y Argentina, don Emiliano Figueroa Larraín y don José Figueroa Alcorta, respectivamente. La exposición incluyó más de 1.700 obras internacionales y otras 250 obras nacionales, considerándose como el evento más importante realizado durante la conmemoración del centenario.
 
Bibliografía:
·         Palacio de Bellas artes, Fundación Futuro
·         Palacio de Bellas Artes, Wikipedia